¿LA REGIÓN ESTÁ DE FIESTA?
"En este séptimo mes del año, países de la región sudamericana están de fiesta; celebran su independencia en medio algarabía y también de tensiones políticas, económicas, sociales, entre otros factores"
En este séptimo mes del año, países de la región sudamericana están de fiesta; celebran su independencia en medio algarabía y también de tensiones políticas, económicas, sociales, entre otros factores.
El primero en celebrar, fue Argentina el pasado 9 de julio, que celebró en todas sus calles el Bicentenario de la Independencia. Sin embargo, no todo el país celebra debido a la crisis económica que tiene sumergida a la Argentina, la tasa de inflación va en aumento y los costes de los servicios y productos están en un crecimiento constante, que a veces es imposible pagar o consumir determinados bienes. Las familias, los grupos sindicales y las personas naturales en general, reclaman a Macri un cambio de política económica para que no se vean afectados tanto como se veían en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner; hoy, el país tiene hambre y solicita a sus autoridades un empleo justo. Sin bien es cierto, Macri recién tiene siete meses en la presidencia y está haciendo todos los esfuerzos para que la Argentina retorne al mundo de las inversiones extranjeras dejadas de lado por el gobierno de Kirchner, poco o nada ha logrado con un diseño y planteamiento estratégico vacío y casi nulo que no garantiza la sostenibilidad del país del sur.
Las movilizaciones en Argentina es quehacer de todos los días, las denuncias a la anterior gestión y sobre todo a la familia Kirchner son los cuestionamientos de a diario; hace unos días, salió a la luz que Florencia Kirchner (hija de los ex mandatarios, Néstor y Cristina) tiene depositado en una caja fuerte 4,600,000.00 dólares, en un país que carece de alimentos y paga una de las tarifas más elevadas de la región en servicios como la electricidad, el agua y el gas (aumentadas por el gobierno del PRO). Hace unos días el FMI estimó que la economía gaucha caerá 1,5% en este 2016, debido a la falta de consumo privado y aumento de la inflación; es más algunos consultores internacionales, advierten que la Argentina podría sea el tercer o cuarto país con la mayor tasa de inflación del mundo, detrás de Venezuela (con casi 500%) y Sudán (con más 200%). En realidad, es una situación preocupante para la administración de Mauricio Macri, que ha sido un hombre bueno en los negocios y la economía privada, pero al parecer no en la economía pública.
Por otro lado, el 20 de julio, en Colombia se celebra el día de la Independencia nacional; el panorama colombiano es muy distinto al argentino, debido a que ellos acaban de firmar una paz histórica con la guerrilla más antigua del mundo -la FARC- que pone cese a las armas y una etapa de diálogo y entendimiento. Sin embargo, la oposición liderada por el ex presidente y actual senador Álvaro Uribe ha manifestado su rechazo a la negociación y conciliación entre ambos frentes y ha solicitado a sus seguidores que pongan lazos negros la bandera tricolor, en rechazo del acuerdo de paz.
No obstante, Colombia, un país del hemisferio norte, del caribe y con gente tan cálida, ha demostrado que a pesar de sus problemas de orden interno sabe sobresalir ante las dificultades; ello, a través, de un informe el pasado mes de abril del FMI que ha estimado que Colombia crecerá para este 2016 en 2,5%, sin dudas sus cifras son alentadoras a comparación de otros países de la región que no crecen y se estacan o peor aún se derrumban en la inflación o hiperinflación. Esta etapa de paz, le abrirá al país del café las puertas del mundo de las inversiones y permitirá que la economía se vuelva a recuperar como en los años 2013 (4,9%) y 2014 (4,4%) e incluso me atrevo a visionar que si sus políticas económicas son más inclusivas, el país tiene para sacar un buen provecho del panorama socio-político económico que vive el sur de América.
Finalmente, tenemos al Perú, un país heterogéneo y con grandes desigualdades sociales (al igual que los países de la región) que el próximo 28 de julio celebra 195 años de independencia, a pocos años del Bicentenario. Este año para el Perú, será transcendental porqué es el cambio del mando gubernamental, asumirá la presidencia de la República Pedro Pablo Kuczynski, un liberal de derecha y muy relacionado con el mundo empresarial. Kuczynski, tomará las riendas de un país que se encuentra sumergido en una economía que va descendiendo, donde la tasa de desempleo solo en Lima (capital) ha llegado a 7,2% (estimado de INEI: 2016), las políticas sociales no se han descentralizado como se esperaba y en donde la seguridad ciudadana ha sido secuestrada por la delincuencia organizada; son arduas las tareas que tiene el próximo presidente y su gabinete ministerial en pro de los ciudadanos y ciudadanas peruanas, que reclaman mejores diseños y planteamientos en las políticas gubernamentales y acción 100% del Estado contra la delincuencia (impunidad) organizada.
El Perú, despide a Ollanta Humala con un tasa de aprobación del 25% -según IPSOS- siendo la más baja de los últimos ex presidentes; recordemos que sus antecesores, Alejandro Toledo y Alan García se despidieron de la Casa de Pizarro con una aprobación del 33% y 43% respectivamente. Humala, que fue una ilusión (para algunos) en el 2011 con un plan de gobierno nacionalista, se retira de Palacio de Gobierno como una gran decepción para el pueblo; ha sido un presidente usurpado y opacado por su propia esposa y sus políticas gubernamentales han pasado desapercibidas en el ciudadano de pie, que siente que el Perú no ha mejorado sino por el contrario ha empeorado en un 30% -según IPSOS-.
El gran reto lo tiene Kuczynski que ha ganado la presidencia por poco margen de su contendora Keiko Fujimori (50.124% - 49,876%), lo que demuestra que tendrá un país dividido y al cual tiene que unir en post de las mejoras de una nación que busca salir del subdesarrollo. Como se sabe, tendrá un parlamento con una oposición que es mayoría; pero, su liderazgo y su grado de concertación será fundamental por el bien del país